Metodología Lean: qué es y cómo aplicarla en tu empresa

Hasta hace algunos años, las empresas solo se esforzaban en estimular la productividad. Sin embargo, hace tiempo que vivimos un cambio de ideal, reforzado por la necesidad de perfeccionar el trabajo y priorizar la calidad antes que la cantidad. Esa es la base con la que hoy te presentaremos la metodología Lean, que te impresionará.

Qué es la Metodología Lean

Es un método innovador, rompedor y relativamente moderno que surgió como respuesta a la necesidad de equiparar perfección con productividad. Esta ecuación puede ser algo compleja, pero fue en lo que se centró (o empeñó) Taiichi Ohno, un ingeniero de automóviles japonés.

Parece contemporánea, pero debes saber que se remonta a los años 80 del siglo pasado. Fue en ese momento cuando se desarrolló esta filosofía que aborda desde la gestión empresarial hasta el trabajo individual. Para ello, se apoya en 2 principios básicos que cooperan entre sí:

• Examinar el proceso productivo para descartar todo aquello que no sea eficiente o necesario.
• Calcular la velocidad de creación para eliminar cualquier proceso que esté obsoleto o suponga un obstáculo.

Para que lo entiendas mejor, debes saber que se estructura sobre una premisa que, a priori, puede resultar inalcanzable. Hablamos de reducir la inversión económica y el tiempo, a la vez que se incrementan los resultados. Probablemente, nos tomarías por locos si te hubiéramos dicho que esto era posible sin hablar de Lean o de los tipos de liderazgo, como ya hemos hecho.

Cuáles son los 4 básicos de la Metodología Lean

Una filosofía contemporánea como esta requiere una serie de valores y principios sobre los que se articule. Nuestra recomendación es que te detengas en cada uno, (no seremos pesados, lo prometemos), hasta que lo entiendas. Solo de esta manera llegarás a aplicarlos en tu trabajo.

Generar valor añadido

Una modificación en la cadena de valor, sea del tipo que sea, debe dar siempre un valor adicional. En ningún caso se introducirán cambios que no aporten y que no hayan sido previamente analizados para determinar si son viables o no.

Fomentar el flujo de trabajo

Una cadena productiva debe ser fluida, es decir, no detenerse bajo ningún concepto. Cuando lo hace, es porque falta cohesión entre los responsables de cada proceso o porque no se ha planificado el trabajo de la manera correcta.

Analizar la cadena de valor

Junto con la productividad, hay que buscar la calidad en las soluciones que se diseñen. Para ello, conviene analizar los métodos y también dar formación actualizada al personal encargado.

Buscar la optimización continua

Los 3 principios anteriores no tendrían coherencia sin este último, que busca diseñar un modelo de optimización circular. Con el propósito de alcanzar la perfección, hay que mejorar cada vez más el trabajo.

Tipos de Metodología Lean

Uno de los objetivos de esta metodología es servir de guía para todos los empleados. ¿Cómo harías que una plantilla entera lograra interiorizar esta forma de trabajar? Para ello, conviene basarse en distintas técnicas que se clasifican en 3 grupos. Es así como llegamos a los diferentes tipos que hay.

De 1º grupo

Estas son las técnicas Lean principales, es decir, las que se deben aplicar a cualquier empresa. Esto, con independencia de los objetivos que se busquen, del sector al que pertenezca o de su situación:

• SMED: Reducir el tiempo de fabricación.
• 5S: Fomentar un buen ambiente de trabajo.
• TPM: Agilizar el mantenimiento preventivo.
• Estandarización: Hacer los procesos comprensibles y compatibles entre sí.
• Control visual: Supervisar activamente el trabajo.

De 2º grupo

En este caso, son técnicas que penetran más en la compañía, dado que alcanzan su cultura corporativa. Pueden requerir una modificación en la filosofía de marca:

• Control de calidad: Para eliminar procesos obsoletos o ineficaces.
• Jidoka: Incorporar sensores en los dispositivos y máquinas de trabajo para detectar averías.
• SSP: Supervisar la implementación del sistema Lean.

De 3º grupo

Cuando una corporación no ha tenido suficiente con los dos anteriores, se aplican técnicas de tercer grupo. Estas suponen un cambio sustancial en la forma de trabajar y suelen llevar varios meses para implantarse bien:

• Kanban: Modelos de producción y programación más innovadoras.
• Heijunka: Establecer un equilibrio entre oferta y demanda más preciso.

Cómo aplicar la metodología Lean a tu empresa

Durante décadas, se han explorado distintas vías para encontrar la mejor manera de aplicar la metodología Lean. Si lo piensas, puede ser algo complicado, dado que la industria que te mencionamos antes era Toyota. ¿Cómo aplicar un modo de trabajo propio de una fábrica de coches a una compañía, por ejemplo, tecnológica?

1. Analizar la corporación en su conjunto. Esto es, identificar las oportunidades de crecimiento y las ventajas que tendría aplicar este método. Habría que planificar también el nivel de inversión necesario y evaluar la predisposición del personal a implementar cambios.
2. Efectuar distintas hipótesis y situaciones. Hay que imaginar cómo podría cambiar el negocio y detectar cuáles son los factores diferenciales de este. Por ejemplo, su imagen corporativa, su filosofía de marca, el valor que aporta su capital humano o la posición que tiene en su sector.
3. Incorporar cambios: Conviene empezar por los de primer grupo para luego ir avanzando. Pasados unos meses, es posible seguir con los de segundo. Después, es imprescindible medir los resultados conseguidos y determinar si se han cumplido los objetivos propuestos.
4. Completar la implementación de técnicas. Luego de ver si se está avanzando lo suficiente, es posible continuar con las técnicas de tercer grupo. Eso sí, recuerda que llevará un tiempo adoptarlas de una forma adecuada, y que será inevitable tener que parar y empezar de nuevo en ciertos momentos.
5. Evaluar el impacto final. Cuando hayas terminado de incorporar todas las técnicas, haz una comparación entre cómo estaba la empresa antes y cómo lo está ahora. De esta manera, les explicarás a los trabajadores por qué ha merecido la pena el esfuerzo realizado.

Un paso más allá

La metodología Lean tiene un valor tan elevado hoy en día que no podríamos dejar de recomendártela. En la actualidad, cualquier CEO, directivo o gestor de equipos que se precie debe conocer los principios Lean, Agile, etc., y saber cómo aplicarlos en su empresa. Si quieres conocer más sobre esta filosofía y otras cuestiones básicas para un buen liderazgo, te aconsejamos echar un vistazo a los mejores cursos para conseguirlo.

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